JABALQUINTO,PASO A PASO, "NACIMIENTO DE UN BARRIO, LOS BELENES"

Nueva sección en la Web Jabalquinto.biz, Olayo Alguacil González nos ofrece cada dos semanas ha todos los lectores que visitan la Web una sección donde podremos conocer rincones con encanto de Jabalquinto esta semana tercera entrega, "NACIMIENTO DE UN BARRIO LOS BELENES".



Vista parcial de Los Belenes

Panorama desolador de la vida en las cuevas, al que hacíamos referencia la semana anterior, que al ser difundido en la revista “Cara y Cruz” y también en “Vida Nueva” tuvieron tal repercusión a nivel nacional hasta tal punto que muchas familias enviaron aportaciones económicas que, junto con las subvenciones oficiales, mano de obra gratuita y los donativos recibidos para ampliar la parroquia, que el entonces párroco D, Miguel Peinado Martínez, natural de Vadepeñas (Jaén), hombre activo, emprendedor y bastante enérgico, desvió para crear el Patronato de la Vivienda con el fin de sacar de las cuevas a las personas que allí mal vivían, hicieron posible la construcción de casas en el Barrio Belén y así poder salir de las entrañas de la tierra.

Construcción de las primeras viviendas

Entre los donativos llegados de toda España se encuentran las 10.000 pesetas ofrecidas por un joven matrimonio con ocho hijos en cuya carta se refería a los artículos publicados en los siguientes términos:

“yo sí, créame, me acordaba de Jabalquinto, el pueblo con cuevas, y cuando leí su primera crónica –como tantos otros- sentí un estremecimiento de angustia, recé un padrenuestro y esperé a que el sueño de aquella noche me hiciera un “lavado de cerebro”. “Nosotros, mi mujer y yo, y los dos en nombre de nuestros hijos, queremos enviarle diez mil pesetas para que las invierta en el pueblo de Jabalquinto. Si este deseo no es realizable, dejamos en sus manos el destino que haya que darles para aliviar tan dolorosas tragedias”.


“He asistido al nacimiento de un Patronato de viviendas en Jabalquinto. El plan es construir doscientas. Comenzaremos inmediatamente por edificar un bloque de cincuenta. Ya tenemos los terrenos. El propietario de los solares que hemos elegido nos da toda clase de facilidades. Total, que van a edificarse por ahora unas cincuenta viviendas. Por firmas que garantizan una operación bancaria y las 30.000 que concede el Estado.

Panorámica de las primeras viviendas construidas

Aquí nos sale cada vivienda por 40.000 pesetas. Como cada una está subvencionada con 30.000, faltan 10.000, que aportarán las cuotas o los donativos. Los propietarios aportan su dinero. Y los obreros contribuirán con jornales.

“Un día, todos los jornaleros de Jabalquinto saldrán a trabajar, como todos los días. Pero aquella noche, cuando regresen, rotos y cansados – exactamente como todas las noches a su regreso -, entregarán el dinero ganado para las viviendas de los pobres”.

Los ministros examinan en el Ayuntamiento los planos de 103 viviendas


El Patronato está naciendo y ya habla. Exactamente como un niño. ¡Qué precioso niño éste que ahora nace en el salón de sesiones del Ayuntamiento de Jabalquinto¡

Aportaciones económicas venidas de toda España, unidas a subvenciones oficiales y abundante mano de obra gratuita que hicieron posible el nacimiento de un barrio: Los Belenes, entregado de forma oficial a los propietarios por parte de los Ministros de Hacienda y Obras Públicas, Señores de Gómez de Llano y Conde de Vallellano.

Los Ministros entregando los títulos de los beneficiarios de viviendas tipo Belén

Olayo Alguacil González

JABALQUINTO,PASO A PASO, "VIAJE A LAS CUEVAS DE JABALQUINTO DE LOS AÑOS 60"

Nueva sección en la Web Jabalquinto.biz, Olayo Alguacil González nos ofrece cada dos semanas ha todos los lectores que visitan la Web una sección donde podremos conocer rincones con encanto de Jabalquinto esta semana, "VIAJE A LAS CUEVAS DE JABALQUINTO DE LOS AÑOS 60".


Vista actual de la entrada de una de aquellas cuevas


Recordando el origen de este nombre que proviene del árabe “Jabal Cantix” o en opinión del profesor Aguilera Pleguezuelo de un híbrido, formado por Jabal, de “Jabal”, monte y el término hispano, de origen latino, quinto y que de todas formas significa monte quinto, iniciamos esta segunda etapa del recorrido por Jabalquinto, recordando aquellas cuevas.

Hasta los años sesenta, las cuevas eran las viviendas predominantes en Jabalquinto. Se distribuían por todo el cerro a lo largo de tres pisos y, según algunas fuentes, llegaban a las quinientas. En la actualidad, estas precarias viviendas permanecen ocultas por haberse edificado delante de ellas. Sin embargo, aún queda visible la entrada y chimeneas de algunas de ellas.

Excavadas en el cerro se componen de una habitación seguida de otra. Al final está la cuadra, donde estaba el burro, la cabra, las gallinas, e incluso la paja. Este tipo de viviendas fueron protagonistas de numerosos derrumbamientos, muertes y penurias en tiempos aún no muy lejanos.

Lo atestiguan los siguientes párrafos publicados al inicio de la década de los sesenta en “Vida Nueva”:

“Vengo de otro mundo. Os digo que vengo de un mundo distinto del nuestro, del que conocéis y conocemos. Era de noche cuando he salido de allí, y en los tres pisos del monte – tres filas de cuevas no había hogueras, ni risas… - . “Aquello es inimaginable. ¿Cómo pueden amar la luz gentes que nacen y mueren en la cueva?. La luz, que alumbra la tierra perforada, agrietada y amenazante. La luz, que talonea de miedo cada habitación bajo la tierra. Al parpadeo de un candil, yo me he acercado a unas paredes que no son como las paredes de nuestras casas, aunque estén blancas por la cal”. “Mire usted: una cama y aquí otra, al lado. Pues en cada cama dormimos ocho. Somos dos familias, y no nos tocamos nada. Pero se les hundió la cueva y ¿qué vamos a hacer?. “Las cuevas de Jabalquinto no son aptas para el turismo, ni para el estudio ni la vocación”.

Chimenea de una cueva incorporada a una vivienda

“Estaba en la puerta de la cueva, sentada, cosiendo la ropa. Hacía un sol hermoso. Había salido a sentarse a la puerta de la cueva porque aquella mañana era, de verdad, una buena mañana de sol. Su marido en el campo trabajando. Como todos los días. Los seis hijos correteaban por allí. Jugaban al sol cuando comenzó el derrumbamiento. Un ruido como si se derrumbara la montaña. Ella, como una gallina que cobija a sus polluelos bajo las alas, corrió hacia sus hijos, y los abrazó. Abrazada a ellos, y sus hijos abrazados a la madre; ella, mirando aterrorizada al monte que se hundía, cansado de ser tanto tiempo monte. De repente, se dio cuenta de que sólo tenía cinco hijos abrazados a ella, y se soltó del brazo y en medio de la polvareda del monte derrumbado, delante de la cueva, supo que su Manolo había muerto. Hasta que lo encontramos. No sé el tiempo que duró aquello, quizá media hora, estaba junto a la puerta y con los brazos en cruz. Al oír el ruido saldría corriendo hacia la calle, pero antes de llegar lo alcanzó la avalancha. Y lo encontramos así, con los brazos abiertos y boca abajo”.

“Aquello es inimaginable. ¿Cómo pueden amar la luz gentes que nacen y mueren en la cueva?.

A la escasa luz de un candil, me he acercado a aquellos enormes lisos, rotos y desgajados, y no me he atrevido a palparlos en la veta abierta de sus brechas, porque se caen.

Algunos de aquellos candiles que alumbraban en las cuevas


Viviendas predominantes que estaban presentes en la mente de aquellas gentes, como lo atestiguan las siguientes canciones recogidas por vía oral:

Venimos de Fuerte del Rey
que es un pueblo muy bonito.
Hemos pasado por Mengíbar
y hemos llegado a Jabalquinto.

Al pasar por el llano
nos dicen los de las cuevas,
Muchachos portarse bien,
vais a ganar muchas perras.

(Canción de comparsa trasmitida por vía oral por Julio Molina Rodríguez)

Me han cogido de la mano
me han metido en una cueva
me ha puesto de cena, perdices, conejos…
de toda ave que vuela.


Desolador panorama el narrado en los párrafos anteriores que, al ser publicados en la revista “Cara y Cruz” y difundidos en “Vida Nueva”, tuvieron tanta repercusión nacional hasta tal punto que muchas familias enviaron aportaciones económicas que, junto con subvenciones oficiales y mano de obra gratuita hicieron posible la construcción de viviendas en “Los Belenes”. Zona por la que se ha ido extendiendo el casco urbano y que será protagonista de nuestro recorrido en las próximas entregas.

Olayo Alguacil González